– Mientras la Fiscalía General del Estado determinó iniciar de manera inmediata un proceso de investigación de los hechos en los que también fueron lesionados periodistas, el Gobierno de Michoacán ha permanecido en un vergonzoso silencio.

La violencia sufrida miles de mujeres que el pasado 8 de marzo se manifestaron en Morelia, producto del accionar de servidores públicos, ha encontrado como única respuesta el silencio gubernamental, lamentó la diputada Fanny Arreola Pichardo, coordinadora de la Representación Parlamentaria de la LXXV Legislatura del Congreso del Estado.

La diputada por el Distrito de Apatzingán recordó que prácticamente ha transcurrido una semana de los lamentables acontecimientos, sin que hasta el momento exista un pronunciamiento serio y puntual por parte del Gobierno del Estado.

“En lo que fue un evidente boicot a la movilización de mujeres, para propiciar la represión y con ello buscar deslegitimar el reclamo social en Morelia, ha derivado en posicionamientos incluso de la Organización de las Naciones Unidas, sumados a los de colectivas, organizaciones, ciudadanía y los señalamientos hechos por la Comisión Estatal de Derechos Humanos”.

Apuntó que mientras la Fiscalía General del Estado determinó iniciar de manera inmediata un proceso de investigación de los hechos, en los que también fueron lesionados periodistas, el Gobierno de Michoacán ha permanecido en un vergonzoso silencio.

La legisladora lamentó que el ejercicio del poder inhiba las convicciones de quienes, por años, fuera del Gobierno, se dijeron defensoras y defensores de los derechos de las mujeres, y que ahora desde la responsabilidad pública resultan artífices y ejecutores de todo aquello que condenaron en su momento.

Lamentó que el cheque de nómina sea la vara que mida las convicciones de los actores gubernamentales, dándole la espalda a una exigencia legítima como de millares de mujeres por el cese a la violencia, a los feminicidios, a las vejaciones, a la negativa de poder ejercer sus derechos.